Los nuevos asentamientos de El Alto sólo se abastecen de agua de carros cisternas privados (Estudio)

Los vecinos de asentamientos nuevos en la ciudad de El Alto no tienen provisión de agua potable ni servicio de alcantarillado, y están obligados a abastecerse del líquido mediante carros aguateros que a la vez obtienen el agua del propio río y/o de pozos subterráneos privados. Mientras la tarifa solidaria de la empresa pública de dotación de agua cobra 2 Bolivianos por metro cúbico en promedio, los aguateros cobran 8 Bolivianos.

“Una familia de 6 componentes que se abastece de carro aguatero, consume en general 15 turriles, que sería 3 metros cúbicos, en un mes, estarían gastando 120 Bolivianos, el turril de 200 litros cuesta 8 Bolivianos. En cambio si recibieran el agua de EPSAS, igual una familia de 6 miembros, igual 3 metros cúbicos, estarían pagando 6 Bolivianos en promedio, tal vez un poquito menos de acuerdo a la tarifa solidaria”, dijo Grover Rojas, en la presentación del estudio sobre los carros aguateros.

Los datos están contenidos en la investigación “Carros aguateros en El Alto”, elaborado en el marco del Taller de Proyectos e Investigación del Habitat Urbano-Rural de la RED HABITAT y del grupo de investigadores “Por el acceso al agua”, entre agosto y noviembre de 2013, en distintos barrios de los Distritos 7, 8 y 13 de esa ciudad. En esos barrios formados por asentamientos nuevos se entrevistó a 338 personas, 160 mujeres y 178 varones, sobre la provisión, acceso y consumo del agua y del alcantarillado.

Uno de los investigadores, Grover Rojas, expuso los resultados del proceso de investigación exploratorio y descriptivo. Las familias se abastecen por tres principales fuentes: agua superficial (ríos), agua subterránea (pozos) y carros cisternas. La provisión del agua potable mediante la empresa pública es difícil de conseguir porque deben presentar personería jurídica y planimetría aprobada del barrio.

El 36% de las personas entrevistadas se abastece por carro aguatero, el 7% por agua de pozo subterráneo, 3% por piletas públicas, 1% con agua de río, y el restante 53% combina cualquiera de las formas de dotación con el carro cisterna. La mayoría de las familias se abastece cada semana, conservando el líquido en turriles impermeabilizados internamente por alquitrán.

Los investigadores tuvieron que perseguir a los carros aguateros para identificar la fuente de abastecimiento del propio carro aguatero. Los resultados mostraron que las personas adquieren el agua con dos propósitos, el uso (construcción, etc.) y el consumo (humano). El río San Roque y el río Achicala fueron identificados como proveedores de cisternas para el uso, en un contexto de alta contaminación de basura, desechos orgánicos, actividades industriales y de reciclaje que derivan en esos cuerpos de agua. Para el caso del consumo, se verificó que los carros aguateros obtienen agua de pozos privados y de fuentes privadas ubicadas en domicilios particulares.

Rojas explica que las áreas periurbanas van a seguir poblándose de nuevos asentamientos, por efecto de la migración, que a la vez van a demandar respuestas a nuevas necesidades, entre ellas la dotación de agua. Por eso existe necesidad de identificar nuevas fuentes de abastecimiento, superar el problema de clandestinidad de los carros aguateros (no existen controles hacia ellos) y sus disputas por el monopolio del comercio de agua entre los distintos barrios.

“Algunas veces el aguatero trae agua del río, cuesta entre 4 a 5 Bolivianos el turril… es más barato… Cuando no hay agua o el aguatero no viene, no hay de otra, tenemos que cocinar con esa agua”, según testimonio de la vecina de zona Los Lirios recogido por la investigación. Este dato es importante porque un análisis de laboratorio en el agua del río dio como resultado la presencia de bacterias coliformes termoresistentes, lo que implica que no desaparecen con el proceso de hervido.

El equipo de investigación estuvo formado por María Silvera Huarachi, Brauliana Pérez Marca, Nicolás Plata Fernández y Grover Rojas Tola, quienes además incorporaron en su estudio un análisis de laboratorio de la calidad del agua.// PIEB (BO)