La contaminación acústica en la ciudad de El Alto alcanza niveles que sobrepasan los índices permitidos y los que podría soportar el ser humano, según estudios del Municipio durante el Día de la no bocina en esta ciudad.
“Esta actividad la estamos desarrollando para concienciar a la población, sobretodo, a los choferes, para que dejemos de provocar ruidos innecesarios que pueden afectar la salud de la población, como el uso indiscriminado de las bocinas y en los puestos que venden música”, explicó la responsable de contaminación acústica del Programa Nayra Punku, Ceja Nuevo Centro Urbano, Irene Quispe.
De acuerdo con la funcionaria municipal, el nivel máximo de contaminación sonora debería ser de 30 decibeles (intensidad del ruido) sin embargo, en los puntos de control instalados en lugares estratégicos, como la avenida 6 de Marzo y el Puente Distribuidor, se verificó que ese nivel incluso es triplicado.
“Estamos utilizando sonómetros que nos indican cuál es el grado de contaminación acústica y en todos los sectores donde hemos desplazado al personal, en algunos momentos, hasta se rebasan los 90 decibeles”, dijo Quispe.
La actividad estuvo apoyada por los educadores urbanos ‘Ekucitos’, quienes con carteles referentes a la campaña transmitían mensajes a la población para preservar el bienestar en El Alto.// GAMEA
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