El Alto de La Paz se perfila como la ciudad demográficamente más poblada y activa

 En los aniversarios se acostumbra a alabar  sin fundamento  a la población  o a  la persona, esto no debe suceder con el El Alto de La Paz, antes subestimada por su altura y panorama agreste, hoy, sin embargo, despliega  impertérrita  su personalidad, fortaleza de trabajo e imaginación cultural que deviene en progreso, además de su determinante influencia en las  sucesivas elecciones.

Escribíamos con el concepto subestimada debido a que El Alto, por su altura, fue y sigue siendo perjudicada por apátridas  que han menoscabado la actividad aeronáutica, bajo premisas de conocimiento anacrónicas y a la indisimulada intención de beneficiar a  otras regiones. El aeropuerto de El Alto fue y sigue siendo pese al debilitamiento de su infraestructura y su expansión necesarias el principal aporte de pasajeros a la red troncal y aeropuertos departamentales.Noticas de El Alto Bolivia

El dinámico progreso en la fabricación de motores de propulsión con superior número de libras de empuje, facilita que en El Alto las aeronaves modernas puedan aterrizar y despegar sin dificultades sin menoscabo a la capacidad en pasajeros y mercancías.

Culturalmente El Alto  es una ciudad  que estudia y sus jóvenes, con extremo esfuerzo, se desplazan a La Paz a las mejores universidades para formarse y aportar con su profesión a El Alto y a Bolivia y lo mejor, como estadística, es que  la mayoría de los estudiantes son mujeres  que garantizarán el futuro de las próximas generaciones y el progreso incesante de El Alto.

El Alto, como La Paz, son un crisol  de afecto y calor humano sincero a quienes, originarios de otras latitudes, desean trabajar  y consolidar el futuro de sus familias, que es lo que contribuye a la coherencia de una sociedad. Los alteños son conspicuos  amantes del trabajo, como efecto de la naturaleza en que se originó  hace décadas El Alto; esta afirmación está respaldada con  la creación de nuevas expresiones culturales; se nota ostensiblemente que los alteños están transformando en positivo la arquitectura tradicional con expresiones propias que naturalmente pasaran a la historia.

El Alto necesita, por su extensión, una modernización práctica de su agricultura, siendo ésta el futuro de El Alto, el altiplano y todo el occidente. Para ello se debe contratar a los mejores  expertos en agricultura como son los israelitas que han demostrado transformar un desierto en un vergel productivo; en El Alto la situación de la tierra es favorable debido a su demostrada productividad; solo requiere de la formación y aquiescencia de los propietarios rurales para ingresar a una productividad que les permita vender más y exportar, acción que podría transformar El Alto y al altiplano en el granero de Bolivia y de Latinoamérica.

El Alto debe progresar  sin pausa, absteniéndose de la política que causa división y retroceso; para ello sus autoridades deben cambiar ipso facto de mentalidad y pensar en El Alto antes que las directrices políticas de sus partidos políticos, dejando por siempre la endémica costumbre  de la dilación y postergación de los trámites administrativos, autorizando, por ejemplo, a una nueva empresa solicitante en el día. Un servidor público  que ama a su región debe conceptualizar su cargo despachando los trámites en el menor tiempo posible, o mejor en el día. Así se progresa.// Opinión - FORO RAÚL PINO-ICHAZO T. Abogado, posgrados en Derecho Aeronáutico, Arbitraje y Conciliación; Filosofía y Política lawfirm_46@hotmail.com

_

Publicar un comentario

0 Comentarios